jueves, 28 de agosto de 2014

Una vacante imprevista, de J. K. Rowling (traducido por Gemma Rovira Ortega y Patricia Antón de Vez)

Lo reconozco. Me daba miedo leer un libro de J. K. Rowling y que se me cayera un mito. Al fin y al cabo, la saga de Harry Potter ha sido una constante en mi vida y un referente literario desde que tenía once años. Sin embargo, puedo decir con alegría que he disfrutado mucho gracias a la lectura de Una vacante imprevista.

La célebre autora ha querido dar un giro a su carrera y a su imagen, y lo hizo por medio de un pseudónimo y un cambio en su trama habitual. En lugar de literatura fantástica para niños y jóvenes, esta vez ha optado por una novela negra, que transcurre en un pueblo tan real como cualquier otro, sin una pizca de magia, y que no ahorra en detalles escabrosos.


Esta obra recibió críticas positivas, así como su supuesto autor. Cuando, ya con el beneplácito generalizado, se descubrió su identidad, se convirtió en un éxito de ventas... y llegó a mis manos. Lo devoré en pocos días, sorprendido por el cambio tan radical respecto a los libros de Hogwarts y encantado por el transcurso de los acontecimientos. Ahora, por tanto, sólo me queda felicitar a Joanne (a estas alturas ya tenemos confianzas) y animarte a ti a que lo leas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario