lunes, 31 de marzo de 2014

Posdata: te quiero, de Cecelia Ahern (traducido por Francesc Borj Folch Permanyer)

Hace un par de meses publiqué una entrada en la que hablaba del vacío que sientes en el pecho al acabar un libro o, en este caso, al no poder hacerlo. Gracias al título tal vez ya habrás adivinado de qué libro se trata y, con un poco de suerte, también habrás deducido que he conseguido terminarlo.

Si me animé a comenzar Posdata: te quiero fue porque ya había leído un libro de su autora y la impresión fue excelente. Además, hicieron una película muy famosa basada en esta historia y el título es muy sugerente. Demasiados factores positivos, no podía dejar pasar la oportunidad.

Y, para colmo, las primeras páginas me engancharon muchísimo (de ahí lo de 'vacío en el pecho'). Es una historia tierna, dulce, entrañable. Un argumento que te saca una sonrisa a pesar de las adversidades y un entorno atractivo y mágico: Irlanda.

Sin embargo, también tengo que reconocer que no todo en el libro es perfecto. Es fácil encontrar pequeñas contradicciones y hasta algún error (al menos en la edición que yo tengo). Del mismo modo, no tiene la misma fluidez comunicativa que If you could see me now... ¿Será porque la autora estaba poco inspirada en algunos apartados? ¿O debido a un fallo de traducción?


Sea como fuere (bonito uso del futuro de subjuntivo), lo cierto es que la historia engancha. Mucho. Consigue que pases las hojas sin darte cuenta y que desees saber cómo evoluciona la trama. En cuanto al final... No voy a desvelar nada, en mi línea. Descúbrelo tú mism@.

No hay comentarios:

Publicar un comentario